La viveza del Renacimiento nos despierta a un aspecto de la vida, que las prisas y el estrés actuales ocultan tras los malos humos del asfalto.
Color, sutileza, alegría… y un sugerido mundo de fuerzas invisibles, son la base de pinturas y frescos, esculturas y bajorrelieves de los que fue uno de los periodos más fructíferos del arte en Europa.
Los relieves policromados que presentamos en esta sección (ver) han recreado toda la riqueza de obras inmortales que quieren colarse, para darnos un toque de alegría, en nuestra decoración.