Descripción
Torso de guerrero romano, reproducción de escultura realizada en mármol moldeado (polvo de mármol aglutinado con resinas). Pátinas de envejecimiento aplicadas con tierras naturales. Texturas marmóreas y pétreas. Escultura con soporte de hierro.
Medidas: Alto del torso: 105 cm. Alto de la base: 65 cm. Alto total: 185 cm.
Peso aprox.: 110 kg.
Reproducción de un Torso de guerrero romano, inspirado en el que se encuentra en la acrópolis de Pérgamo cerca de Bergama, Turquía.
La decoración con reproducciones de esculturas de personajes de la Antigüedad clásica, como esta escultura de un general romano con armadura, es una forma elegante y atemporal de dar un toque de sofisticación a los espacios de nuestro hogar, en especial de exteriores.
Reproducciones de grandes esculturas clásicas, como este torso romano, son una aportación ideal para la decoración de exteriores. Colocando estas estatuas en un lugar central de nuestros jardines y terrazas, infundimos a estos espacios una especial elegancia y armonía. Esta escultura, que captura la majestuosidad y la serenidad del arte de la antigua Roma, da un toque atemporal a nuestros rincones favoritos al aire libre, en los que la figura del noble romano se fusiona con la vegetación circundante, transmitiendo una sensación de austera belleza.
Al integrar estas grandes esculturas en el diseño del paisaje, conseguimos una síntesis armoniosa entre la estética antigua y la naturaleza. Colocadas sobre el suelo o un pedestal, estas obras de arte pueden servirnos de inspiración y hacernos sentir una especial conexión con la historia. La piedra, bronce fundido o el mármol moldeado con resina empleados en la fabricación de estas réplicas resisten bien a la intemperie, asegurando su durabilidad y resistencia en espacios al aire libre expuestos a las inclemencias del tiempo.
Estas estatuas, colocadas en un jardín, nos evocan la cultura clásica y se convierten en un elemento central, atrayendo la atención y ayudando a entablar un diálogo fascinante entre el arte y la naturaleza. La decoración con reproducciones de esculturas antiguas puede transformar los espacios de nuestro hogar en escenarios de serena belleza donde poder relajarse con una buena lectura, reflexionar o meditar.
Angelina1 –
real, parece que tengo en el jardín una pieza auténtica